La teoría del apagón de internet también encontró sustento en el hecho de que el pasado 3 de julio si hubo un apagón en las ondas de radio en el Atlántico a causa de una tormenta solar.
Sin embargo, las interferencias en la propagación de las ondas de radio podrían producirse en caso de que esta radiación, cuente con la suficiente energía para calentar y distorsionar la ionosfera, que es la parte de la atmósfera terrestre que está ionizada permanentemente por la fotoionización que provoca la radiación solar. Es decir, una tormenta de estas características podría provocar que toda nuestra red de comunicaciones quede fuera de servicio en el peor de los escenarios.
La respuesta concreta es sí, pero se tienen que conjuntar una serie de factores para que esto suceda. José Luis Quiñones, experto en el sector aeroespacial, dijo a 20Bits que el flujo de partículas (protones y electrones) eyectados del Sol pueden impactar contra la Tierra si coincide con la trayectoria de la órbita terrestre; impacta sobre nuestro campo magnético y atraviese la atmósfera e interfiera con las redes eléctricas y de internet.
Más allá del temor en los servicios de internet, lo que sí debería de preocupar es que las tormentas solares si pueden dañar de forma irreversible los transformadores de la red eléctrica, el funcionamiento de GPS podría demorar semanas en recuperarse y, lo más peligroso, podrían registrarse problemas en la navegación aérea.
Lo único positivo que tienen este tipo de tormentas solares es que podría darse la posibilidad de ver espectaculares auroras en el hemisferio Norte del mundo.