La acción fue parte de la iniciativa Angels, que busca mejorar la atención médica, la prevención y los tiempos de respuesta de los equipos médicos ante un ACV.
Sufrir un accidente cerebrovascular agudo, también llamado ACV, es una de las emergencias médicas más graves que puede padecer una persona. En el mundo 15 millones sufren ictus cada año y un tercio de ellas muere como consecuencia de la enfermedad, mientras que otro tanto queda discapacitada de por vida.
En este contexto, Entel participó en la Iniciativa Angels, dirigida por el laboratorio de origen alemán Boehringer Ingelheim, que busca mejorar la atención, la concientización sobre la importancia de la prevención y la respuesta rápida ante un ACV. Esto es fundamental, ya que al enfrentar a tiempo la situación se pueden salvar más vidas y prevenir discapacidades catastróficas, lo que significa que miles de pacientes pueden volver a la vida que conocían.
Como parte de esta campaña de concientización, la Torre Entel se unió a otros monumentos en Santiago que iluminaron durante el domingo sus fachadas de rojo, color que simboliza la relevancia de abordar esta emergencia crítica de salud.
